Siendo uno de los países predilectos para el turismo internacional (el quinto a nivel mundial por volumen, calculado en más de 60 millones de visitantes anuales), ni el mismísimo Ángel Caído se quiso quedar sin conocer Italia. ¿Como? Bueno, vayamos a descubrir juntos la Culata del Diavolo.
Umbria, la tierra del demonio
El titulo no tiene animo de ofender bajo ningún sentido ya que la región en cuestión llama mucho la atención sobre la gran cantidad de nombres de lugares como grutas, casas, puentes y piedras "del diablo". Muy normal no parece, sobre todo porque no hay una explicación probada ni una leyenda o mito único que nos de alguna pauta del porque de esta faceta tan peculiar de Umbria. Nosotros hoy vamos a presentarles justamente uno de esto lugares, que posee una leyenda fantástica y muy interesante: la Culata del Diavolo.
Y cayó
Para ser exactos estamos hablando de una localidad cercana a Orvieto llamada justamente Culata del Diavolo ya que su nombre da la idea de una caída. Si, la "culata" hace referencia a cuando caemos o nos golpeamos la parte baja de la espalda (imagínenselo, no me hagan escribirlo por favor). Así que este lugar fue bautizado así por la creencia de que, cuando el ángel Lucifer fue desterrado del paraíso por Dios, cayó en picada hasta toparse con la tierra y, al parecer, Italia fue la destinación. Como podemos advertir por el nombre, claramente no logró aterrizar de píe, así que debe haber sido una caída bastante dolorosa.
No se ustedes, pero yo creo que el diablo tuvo bastante suerte de caer en Italia y poder visitar una de sus joyitas naturales como es la Umbria, con la ciudad de Perugia como referencia y la basílica de San Francisco de Assisi, uno de los templos religiosos más bellos del planeta. En fin, visitar la región es un lujo, y tal vez la leyenda de la Culata del Diavolo es justamente un recordatorio de que ni Lucifer se quiso perder la ocasión de ir como turista.
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