Esto parece el comienzo de uno de esos chistes viejos pero no, es la realidad. Paso esta semana a Biella (Piamonte) que un medico No-Vax intenta vacunarse con un brazo falso, tratando de engañar no solo el sistema sanitario, sino a toda la ciudadanía. Una actitud tan reprochable como alarmante y que demuestra lo lejos que estamos del fin de esta pesadilla.
Todo por un Green Pass
Es de publico conocimiento que en Italia resulta obligatorio tener atestado el Green Pass para la mayor parte de los trabajos y actividades que se realizan en espacios cerrados. Es más, en estos días salió un nuevo Super Green Pass para tratar de parar la próxima ola de Covid-19. Italia se esta mostrando como uno de los países a la vanguardia sobre medidas sanitarias y los números atestiguan la utilidad de estas.
Pero también es uno de los países con mayor cantidad de No-Vax, que están dispuestos a todo para no someterse a la vacuna contra el corona-virus. Es aquí donde entra el dilema: si no me quiero vacunar ¿cómo hago el pase sanitario para poder trabajar?
Guido Russo, un medico odontología de 57 años (único suspendido a Biella justamente por no querer vacunarse) parece haber encontrado la respuesta. Se presentó al centro de vacunación con un brazo de silicona que comprendía el hombro con el músculo deltoides en el que insertar la aguja y trató de engañar a uno de sus colegas.
Acá les dejamos la declaración de la operadora sanitaria que logró darse cuenta del truco notando que el color y la textura del brazo eran anómalos. El señor Russo la quiso convencer pero fue prontamente denunciado ante las autoridades competentes.
En fin, esperemos que este sea solo un caso aislado y que la ciudadanía responsable siga las recomendaciones de los expertos y de las autoridades y no intente papelones tales como nuestro medico No-Vax.
