Alrededor del Lago Maggiore se encuentran las posesiones de una poderosa y antiquísima familia: las Terre Borromeo, un conjunto de palacios históricos, que acogen museos y colecciones de arte de grandísimo valor.
Pero, además de haber siempre sido grandes mecenas y apasionados de arte, los Borromeo muestran también, ya hace siglos, una insólita curiosidad para la naturaleza que los ha llevado a crear unos jardines que se parecen más bien a paisajes fabulosos.
¿Cuándo ha empezado esa historia?
La familia Borromeo, originaria de Roma, es una de las más antiguas y prestigiosas de Italia. Se mudó temprano a Toscana y luego, en el siglo XIV, después de un matrimonio que la conectó con los señores de Milán, los Visconti, decidió trasladarse a Lombardía, donde llevó adelante la próspera actividad bancaria familiar y no solo.
Durante los siglos los Borromeo han adquirido o hecho construir fortalezas y palacios, como la Rocca d'Angera, que es también la sede del más grande Museo de la muñeca y del juguete de toda Europa, y el Palazzo Pallavicino, con un gran parque donde viven animales raros y donde además son acogidos ejemplares rescatados..
Pero no es todo: eran también los señores de un archipiélago de pequeñas islas que asoman de entre las aguas del Lago Mayor, en Piamonte, llamadas justamente Isole Borromee. Ahora quedan de propiedad de la familia las dos islas más grandes, conocidas como Isola Madre y Isola Bella, y tres escollos sobre los cuales se destacan las ruinas de antiguos castillos medievales: los Castillos de Cannero.
Cofres de tesoros en medio del agua
Tanto la Isola Madre comola Isola Bella, fueron incluidas por el New York Times entre los diez lugares más fascinantes del mundo, son de pequeñas dimensiones, pero suficientemente extensas para hospedar un magnífico palacio cada una y un jardín verdaderamente asombroso. Pero aquí la naturaleza es tan espectacular gracias al ingenio y al asiduo e incansable trabajo del hombre.
La Isola Madre acoge un palacio que custodia objetos de familia, para mantener memoria de su gloriosa historia. El jardín a la inglesa, que Gustave Flaubert he descrito como «El lugar más voluptuoso del mundo» se viste en cada mes del año de los colores de flores diferentes y perfumadas, algunas rarísimas, intercaladas a árboles exóticos procedentes de cada ángulo del globo, que prosperan gracias al microclima del lago, algunos de ellos vetustos y colosales, como el Ciprés del Cashmir, que es el más viejo y el más grande de Europa y ha sido plantado en el lejano 1862.
En medio a toda esta naturaleza de ensueño, viven en libertad aves multicolores de diversos orígenes, y en particular elegantísimos pavones blancos.
¿Un navío de piedra?
Quizás aún más notable es la Isola Bella, che a lo largo de los siglos ha sido adornada de un magnífico palacio, ejemplo extraordinario del estilo Barroco, estudiado para parecer un navío en el medio del lago, ornado con mármoles preciosos, trabajos de ebanistería, estucos preciados y colecciones de arte.
Pero, posiblemente, es aún más fantástico su jardín a la italiana, subdividido en diez terrazas decoradas por un desbordamiento de flores y plantas exóticas, que enmarcan arquitecturas decorativas, estatuas y fuentes, como en el caso del Teatro Massimo, lugar tan encantador que ni parece real.
Entonces, ¿qué más añadir? Solo queda decir que les deseamos a todos que puedan visitar las Terre Borromeo, en particular las Isole Borromee, para sumergirse, aún solo por algunas horas, en la atmósfera encantadora de unos de los lugares más bellos del planeta.
